Instrucciones para ser feliz
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Búsquese la palabra Felicidad
tiéndasela en un papel a nuestro lado
procurando que “Fe” quede a la altura,
bien cerca, de los ojos. Acaríciesela
con un tierno vaivén de arriba abajo
y viceversa, mientras se recita
plácidamente, reiteradamente
su nombre, poniendo énfasis en “Dad”
y siempre con la vista puesta en "Fe".
Se irá notando a ritmo acompasado
un creciente sopor, un progresivo
desinterés del mundo, un paulatino
éxtasis interior, como un letargo
muy próximo al nirvana. En ese punto,
miraos. En ciertos casos basta eso
para una hermosa y excelsa carcajada.
Foto: El Picacho (Cádiz)
posted by manolotel | 12:25 p. m.
36 Comments:
Un poema redondo...El final me encanta.Siento esa carcajada retumbando en mi oído. Eres un excelente poeta y me alegra haberte encontrado.Un abrazo
Gracias Marisa. Se trata, en parte, de eso, de reirse de uno mismo y un poco también de esas indagaciones tan pretenciosas que a menudos son, precisamente, la causa de nuestra infelicidad.
Si definimos el tiempo como aquello que pasa mientras tratamos de encontrarlo, de la felicidad, según mi peregrina teoría, también podría decirse lo mismo.
En cualquier caso la complicidad de tu lectura ya me parece bastante recompensa.
Un beso.
Estimado Manolotel: con poemas así aún en tu zurrón, cómo dejarse tentar por el silencio. Hace unos días apuntabas la posibilidad de no volver a escribir un poema y, acto seguido, tu voz resuena más rotunda y fresca, si cabe. El poema es hermoso, original y lleno de verdad.
Y nosotros, tus lectores, necesitamos seguir bebiendo de tu palabra.
Un abrazo,
Antonio.
A fe que nos la entregas,
considero que nos das,
como quien escala una ironía,
el placer gentil de abusar
de nuestra feliz idoneidad
para calmarnos por un momento
bajo el favor de tu poema,
poema aquí, 'ici' en francés,
arropado bien entre la fe
y lo que siempre, siempre
no aconsejaron: dad.
Besotes felices.
Efectivamente, amigo, como dice A. del C., he aquí una respuesta precisa y salerosa a las cuitas y nubarrones en el horizonte del otro día... Ah el humor, el único medio capaz (quizá) de encauzar convenientemente los humores...
Estimado Antonio: Ni yo mismo sé como he conseguido escribir estos versillos. Supongo que mi subconsciente habrá captado algún pensamiento/comentario del tipo "Menos mal que nos va a dejar tranquilos este plasta de poeta" e instintivamente me he puesto a escribir en defensa propia :-)
De todos modos, una vez tomada la decisión de dejar de escribir (que era lo dificil) puedo, ya más tranquilo, dejar para otro día la elección del momento de hacerlo.
A fin de cuentas, como escribió Omar Jayam: "Breve es la vida como un incendio. Llamas que el romero olvida, cenizas que esparce el viento".
Un abrazo.
Querida Sofía, el esfuerzo que has hecho por darle sentido a esta ocurrencia mía no hace sino ensanchar mi corazón para agradecerte el detalle y la elegancia "chic" de tu comentario.
Incluso te has preocupado de desnudar las claves de mi pequeño juego de palabras (vestigios de una tardía lectura de Plauto) con el que apuntaba unas relaciones curiosas entre la parte y el todo.
Por todo: un beso gordo.
Cuanta razón respiras amigo Alfredo. Contra las nubes (y en el caso de Cádiz, los vientos de Levante) de los malos humores, un poquito de humor de los días claros para compensar.
Un placer tenerte por aquí. Me leí todo el resumen de Valdediós, y al hilo de la actualidad iré a leer tu pequeña contribución a la promoción del Euskera, cosas ambas que para un lego como yo resultan curiosísimas, aunque dificiles de comentar.
Un abrazo.
...creciente sopor, progresivo desinterés del mundo, éxtais interior, letargo... ¿Ese papel sobre el que se extendía la palagra no será un papel de fumar?
¡Y no olvides lo de la carcajada de después...! :-)
El subsconsciente, que es muy tricionero.
Un abrazo.
Son fecundas las palabras, tanto desde la etimología como desde la semántica.
Pero participo de tu propensión al juego de tomar la palabra y su forma externa (de pequeños jugábamos a decir a toda velocidad monja hasta acabar diciendo jamón) para llegar a la carcajada desde el sopor, el desinterés por todo, el éxtasis y el letargo.
Reírse de uno mismo es un bello final para un poema impecable.
Un abrazo.
Coincido contigo, amigo Ybris que en el fondo, la poesía tiene mucho de ese "jugar con las palabras" que mencionas. Incluso acudiendo al efecto visual que promovían los creacionistas como Huidobro. Yo no llego a tanto pero me encanta intentar esa mezcla de significados por ver luego el caleidoscopio del resultado.
Un placer, siempre, tenerte por aquí.
Un abrazo.
Ya lo creo que es un poema redondo como bien dice Marisa.
Buenas tardes, Manolotel.
Buenas tardes Mertxe
Suena raro (y agradable) este tipo de saludos en un mundo sin horarios como es internet.
Gracias por el piropo en la parte que me toca, porque ya sabes que uno pone las palabras y eso, de momento es solo intención, no más; luego hace falta que alguien lo lea y lo haga poema en su corazón.
Un beso.
Buena descripción lírica y acompasada de la palabra. Un mucho de empeño en la primera sílaba, otro tanto de entrega en la última y un demorarse y recrearse mientras se pronuncia interiormente Fe/li...ci.../Dad... Has hecho que comprobara su cadencia y aunque no me produce carcajada, si una amplia y relajada sonrisa :)
Nada que no esté en nosotros mismos podemos hallarlo fuera.
Besos con sonrisa feliz.
Te aseguro que, como suelo hacer antes de comentar un hecho, también yo lo comprobé y como ví que funcionaba por eso lo escribí :-)
Lo que pasa es que, como ya sabes, los andaluces somos un poco exagerados y nos reimos de cualquier tontada. Pero una sonrisa relajada y amplia ya está bien ¡eh!.
Ya me doy por satisfecho, Shandy.
Un besote.
No sé por qué hago esta asociación: empiezo a leer, termino, entro en cadencia y vuelvo a empezar con la palabra: Esfúmese, y continuo diciéndome por lo bajini, esfúmese todo lo que no me produzca felicidad, como si fuera un brujo poético. Pero no lo soy, aunque me gusta esa palabra.
Abrazos.
El experimento funciona en sus distintas modalidades. Y es adictivo.
Creo que fue Ionesco a propósito de los Martin y los Smith de "La cantatrice chauve" quien dice aquello de: "Toma un circulo, acarícialo y se convertirá en un vicio".
De ahí viene aquello de "circulo vicioso"... supongo. O al revés.
No te esfumes, apreciado Tempero, que tus comentarios siempre traen brisa fresca y reflexiones.
Un abrazo.
¡Ah! cómo me gustan tus reflexiones, tus aparentes banilades (jajá)y tu inteligencia para contar lo que de tan obvio que nos pasa siempre desapercibido. Eres un mago de la palabra.
Me ha alegrado regresar a casa y toparme con tu comentario en mi blog y con esta maravilla con la que nos obligas a terminar en carcajada.
Gracias por no haber cumplido ese adiós que anunciaste y por escribir como escribes.
Yo sigo por tierras de la Vera, disfrutando paisajes pero añorando las letras de amigos mágicos como tú.
Besos enormes.
Maravillosos paisajes los de la Vera que recorrí y disfruté hace ya unos cuantos años. Seguro que lo estarás pasando estupendamente.
Me alegra saber que te has divertido con estos versillos hechos a volapié pues no se trataba de otra cosa.
La magia está en la palabra y por eso me alegra de que sigas regalándonos tus versos.
Un beso fuerte, querida amiga.
Todo un mantra, Manolo, una receta infalible para respirar.
Un abrazo
MArian
Pues, algo así, Marian. Un mantra es una forma de comunicación con un universo que no se rige por las leyes de la mecánica y donde la felicidad no depende de nada exterior. Como decia el comentario de shandy, nada que no esté en nosotros mismos.
Un abrazo, estimada amiga.
Búsquese la palabra TRISTEZA y a la altura de los ojos ponga TRIS y en un tris, acaricie su TE de las cinco, un té verde con limón y deje el ZA que vuele solo en un avión de papel, de esta manera convertirá su tristeza en ALEGRIA.
Excelente texto.
Me alegra que te haya gustado mi "Jugando con Girondo" y de regalo por venir a mi casa, te traigo un poema de Carlos Marzal muy apropiado para tu texto, en mi voz claro:
pluscuamperfecto de futuro
Gracias por venir, Alma y perfecto el regalo. Ya lo conocía pero en tu voz suena mucho mejor.
Con respecto al té verde (mi preferido) habrá que probarlo con ese ZA volando por la habitación en su avión de papel a ver como resulta. Ya te contaré :-)
Un beso.
Hoy te traigo a Benedetti como no podía ser menos.
recordando a Benedetti
Se intenta, se intenta...
Un besito enorme.
Gran poeta de la sencillez, Benedetti. Gracias Alma, tu recitado es perfecto.
Un beso.
Amiga Ylka, tu no necesitas ningún papel (más que ése único y auténtico de tu propia vida) para acceder a la felicidad. Eso y...
Un beso.
Mi método, arisco y repentino, no surte el efecto dulce y perdonador del tuyo. Una autocarcajada que no lleva a autoquererte mal.
Aguantemos, querido Manolotel. Como decía Goytisolo, el Arte es grande, pero la vida chuita.
Un brazo
Los métodos se pueden sumar, estimado amigo.
Hay una especie de justicia compensatoria en esto de reirse, aunque sea de uno mismo, cuando todo alrededor te pide que estés cabreado, pero no tiene porque ser antagónico con esas pequeñas venganzas domésticas que nos hacen sentirnos un poco (...un poco) influyentes en la marcha del "mundo".
El Arte es grande pero la vida continúa imperturbable apurándonos con sus cotidianas miserias y no está de más combatirlas, también, con el recurso del absurdo.
Y, si no, que se lo digan a los geniales Gila y Fernán Gómez, Q.E.P.V.E.N. (Que En Paz Vivan Entre Nosotros).
Un gran abrazo.
Hermoso poema, sí señor.
Gracias por tu visita a mi pequeña tienda, así te descubro y me gusta lo que leo.
Un saludo
manolotel
paso a saludarte y encuentro tus insrucciones
tan válidas como a veces olvidades
gracias
un beso
Bienvenido, Moreiras.
Me alegro de que te haya gustado el poema y el sitio. Espero que disfrutes con mis escritos.
Un abrazo.
Por supuesto, olvidables, estimada Mabel. Es un adjetivo muy apropiado. Las cosas que más sentido tienen suelen ser transitorias. En cambio lo que se hace para ser imperecedero, salvo honrosas excepciones, suele hacerse invisible en muy poco tiempo.
Gracias a ti por venir.
Un beso, amiga.
Hola Manolotel,
He llegado hasta aqui a través del blog de Alfonso (paraisoenobras), Resulta que después de un soponcio laboral que me acabo de llevar...(vulgarmente llamado mal rollito), en vez de seguir trabajando me he pusto a pasear por los blogs para distraerme, y justo leo tus palabras sobre la felicidad.... y yo con el alma en la garganta. Intentaré seguir tus instrucciones. Gracias. Un beso
i.
Gracias por pasarte, Isabel y espero que hayas encontrado aquí un poco de distracción de los problemas cotidianos.
Hay dias que es mejor no levantarse :-) pero bueno, todo pasa, así que a animarse.
Un beso.
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