Tu velo de novia
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Cendal que fue de Circe y engañosa
con él cubrió la copa que ofrecía
al cauto Ulises por robar su hombría
y transformarlo en pez o en otra cosa.
Esa gasa también hoy, primorosa
la copa oculta de tus labios fría
que a otro novio, que nada desconfía,
de humano va a tornar en vil babosa.
Igual conmigo hiciste, un hechicero
brebaje hay en tu boca que convida
a olvidar lo más puro y más hermoso
¡Pobre del que te besa…! Siempre espero
ver a otro brujo que a vengar mi herida
llegue un buen día y te convierta en oso.
14 Comments:
Sonetizando rencores, cuanto refino, espero respuesta a correo.
Abrazos
No te preocupes Victor que no tiene nada que ver con la realidad. Tengo otros, hechos en femenino, en que el malo soy yo y la buena ella. Yo es que estos poemas llenos de tópicazos no me los tomo demasiado en serio.
La verdad es que no pensaba ponerlo pero cuando se me vino a la cabeza el último verso, me hizo tanta gracia (la Asociación de Feministas en Pie de Guerra -AFPDG_ me perdone) que al final decidí encasquetar (encasquetar-os)este sonetillo con aires neoclásicos a mis sufridos leyentes.
Hombre, ya sé que lo que cuenta es jodido pero no hay que tomárselo a pecho. Además, ese último verso de Resentido sin Causa es... Yo lo imagino como esos tortazos -¡Cómo son estos romanos!- que endiñaba Obelix en los comic. Cruel, sí, pero gracioso.
Un abrazo.
Me recuerda a los grandes; por citar uno, Quevedo.
Me ha encantado...
Besos.
Eres un gran conocedor de la tradición. La verdad es que me he reído con tu poema incluso antes de saber que no tiene que ver con la realidad.
De haber sido así, merecido se lo tenía (eso lo doy por descontado). Un poco de rencor expresado con mala leche y humor no puede hacer daño al rencoroso.
Ese deseo del último verso me ha recordado que Vainica Doble lo usa en su canción "Réquiem por un amigo":
"Conseguiste llegar alto
Y eres pese a tu dinero
Un oso más que da saltos
Al son del mismo pandero".
Espero que sigas sacando del cajón estas cosas, porque un poco de aligeramiento, entre tus poemas esenciales, siempre es bienvenido.
Solo un remedo, Rocío. Quevedo fue el primero que me abríó la puerta a los sonetos y le guardo un rinconcito de mis modestas habilidades para intentar estas malas imitaciones. Claro que si no contara con vuestra tolerancia no me atrevería a hacerlas públicas.
Gracias Rocio. Un beso fuerte.
La intención primera fué satírica pero luego, a la hora de transcribirlo al papel, es dificil matizar lo que hay de caricatura en una determinada realidad.
Recurrir a la exageración, a modo de esperpento, a veces funciona pero la propia estructura tan formal que tiene el soneto, hace que también tenga mucha fuerza una interpretación seria de la situación.
Quizás la clave, como he comentado anteriormente esté en ese (a mi parecer jocoso) último verso, pero influye mucho el ánimo con el que comiences la lectura, o, como tu comentas, la intención que se intuya a partir de los primeros versos.
En todo caso, cada cual lo entiende como lo siente y así es como debe ser.
Me encantó la letra de esa canción que no conocía. Intentaré abundar un poco más en la via lúdica, para que esto no resulte un tostón.
Un abrazo fuerte, amigo.
las tontas también podemos llevar velo de novia??
Las tontas ni siquiera sienten la tentación de abrir este blog y mucho menos de leer este soneto... Y menos aún de hacer un comentario inteligente como el que tú acabas de hacer.
Merece la pena esperar un par de años para volverte a "ver" por mi blog. Bienvenida de nuevo.
Un besote.
Lo tuyo es virtuosismo.
Humor y juego.
Vaya si se agradece cuando es de altura.
Un abrazo.
(No te comento el anterior -eso sí que es virtuosismo- porque mi conexión tiembla desde mi refugio ante la prepotencia de las operaadoras telefónicas y se corta cuando quiere)
El humor que no falte, estimado amigo. Sobre todo en estas fechas que lo único que se apetece es pasarlo bien: comer, beber, nadar y mucho etcétera.
Un abrazo.
Canónico soneto con aires quevedescos.
Cuanto admiro a los soneteadores! Qué difícil es hacerlo y con qué maestría algunos los conseguís hacer!
Felicidades!
El último verso renueva el mito y eso yo me imagino (no "sé") que no es ninguna tontería. No sé qué te parecerá que te diga que para mí los sonetos tienen mucho que ver con el laúd y la guitarra.
Y a las feministas ni caso.
Gracias, Soboro. Se intenta, se intenta.
Un besote
Vivimos inmersos en mitos. Los clásicos nos enseñaron el camino y no nos salimos de la vía.
Un beso, amiga.
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