Al tercer día
Aquí y allá
Creo que debo poner esto ahí y eso allá
para que el sol que la persiana matiza
penetre en el cajón y los papeles
que sin vigor fondean,
cobren quizás vigencia, persistencia,
quizás aura.
Pero si quito esto y eso y aquello
que me estorba ¿Dónde pongo los clips?
¿Dónde los lápices sin punta,
los bolígrafos y los rotuladores?
¿Dónde pongo la foto de los nietos?
¿Dónde el vaso las llaves, los pañuelos?
¿Y donde yo… que estorbo. Yo que le estorbo al sol?
Tolerancia cero
No me des la razón
No me digas que si con la cabeza.
No me comprendas como se hace a un viejo
porque ya nos parece inofensivo.
Yo soy justo lo que eliminarías si te ofrecieran
arma, ocasión, impunidad, pretexto
Yo sería además culpable de tu crimen
por pensar como pienso.
No te adaptes a mi estado de ánimo
Dame motivos para juzgar tu credo
igual que yo lo hago, sin ambages.
Discute mis razones con las tuyas,
no te escudes en lo ambiguo del silencio.
No me sufras, rebélate
si crees que te convenzo y no lo admites
o si pongo en peligro tus criterios.
Yo por ti haré lo mismo
Podremos convivir cada uno con su idea
No te entiendo ni quiero que me entiendas,
Pero respétame como yo te respeto.
El último ojal de la camisa no es igual
Y vio pasar un tren y otro tren y otro tren
y los dejó escapar
pensando: Mejor, esperaré
al último, al final.
Pero el último tren no iba a Jaén
Y es que el último ojal no es vertical. posted by manolotel | 2:04 a. m.
6 Comments:
Querido amigo:
Recibo con gozo y emoción este tríptico tan cargado de belleza, firmeza y claridad. Y vuelvo a decirme lo que ya me he dicho más de una vez durante tantos meses de ese silencio tuyo: ¿Por qué no nos regalará sus versos más a menudo?
Por favor, no te hagas rogar tanto.
Un fuerte abrazo.
Pues me has pillado, como siempre, revisando y en un "lo borro todo, no lo borro" . Todavía dudando sobre la necesidad de mi humilde contribución al de por si extenso panorama de agricultores de la palabra que desborda la Red.
Gracias, amigo
Tienes razón, manolotel: extenso panorama de agricultores de la palabra, pero no todos son, como tú, peritos (vaya aquí un guiño cómplice).
Abrazos.
Qué suerte pasarme a ver si se se había cancelado ya el obituario por la esperada desaparición del cuerpo del delito.
Qué sencillez la de esta poesía de la pequeña experiencia. Y es que a algunos la gran experiencia nos viene ya como el traje heredado de nuestros hermanos mayores.
Un gran abrazo
Gracias Nán por no perder la esperanza en este tipo. Yo le doy por amortizado pero no tengo claro en que otra cosa se puede uno meter.
Supongo que seguiré dejando caer, de vez en cuando, retazos como estos de mera cotidianedad. Fuera hace cada vez más frio y más desierto adentro.
Abrazos.
Con su venia, me quedo el último. No, no "me quedo con el último". Digo que me lo quedo.
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